Add parallel Print Page Options

30 Pero cuando vino este tu hijo, que ha consumido tus bienes con rameras, has hecho matar para él el becerro engordado.

31 Él entonces le dijo: Hijo, tú siempre estás conmigo, y todas mis cosas son tuyas.

32 Pero era necesario hacer fiesta y regocijarnos, porque este tu hermano estaba muerto, y ha revivido; se había perdido, y ha sido hallado.

Read full chapter

Bible Gateway Recommends